Primrose Lake es un pintoresco pueblecito en las Montañas Rocosas, aunque no es tan idílico como parece a simple vista. Cuando Jenny Carlyle, haciendo autoestop, se sube al coche de un completo desconocido, enseguida se da cuenta de que algo no va bien. Sin cobertura. Sin Internet. Nada que hacer salvo ganar tiempo e intentar mantenerse a salvo. No es fácil.